Más que una simple casualidad, marzo en lanzamientos representó el enorme auge que cada vez hay sobre las mujeres en la música. Sin importar los gustos que podamos tener el equipo que forma este sitio, nos parece increíble como mujeres han tomado relevancia en todos los ámbitos artísticos y, sobre todo, la enorme respuesta del público. Tan solo en marzo tuvimos uno de los conciertos más esperados: Bikini Kill, pieza clave en el movimiento Riot Grrrl, que atrajeron a un buen público que esperaba con ansias su visita.
Regresando a nuestra selección de marzo podrán notar que muchos de nuestros favoritos son hechos por mujeres: Adrianne Lenker, Kelly Moran, samlrc, Mizu, Kim Gordon, entre otras que amamos.
1. Dali De Saint Paul/Maxwell Sterling – «Penumbra».
Descubrí este disco a través de la tienda de discos Boomkat, la primera vez que lo escuché atrajo toda mi atención y la primera impresión fue lo meticuloso que son cada uno de sus temas, al mismo tiempo que despiden una atmósfera obscuro en sus primeras cinco canciones, siendo: Interlude y Late Junction la fusión de todo lo anterior escuchado una suerte de rareza pero finamente elaborada. De la mano del músico y compositor Maxwell Sterling, Dali de Saint Paul muestra un trabajo que incita a la contemplación en cada uno de los componentes que se escuchan de fondo.
2. Kelly Moran – «Moves in the Field»
Con su séptimo disco, la neoyorquina Kelly Moran comparte en «Moves in the Field» delicadas piezas que, como su mismo nombre lo dice, representan los movimientos corporales o ambientales y lo bello que representan. A escoger una sola canción destacaría Sodalis (II) , una pieza etérea con un aire cálido y al mismo tiempo nostálgico y liberador. Sin importar que canción sea, Kelly ejecuta cada tema a la perfección.
3. MIZU – «Forest Scenes»
Capas delicadas acompañadas de sonidos atmosféricos, la neoyornika MIZU lanza su segundo disco de estudio «Forest Scenes». Partiendo de su chello, MIZU comparte finas piezas orquestales que hipnotizan al escucha y lo adentran en un viaje mente-cuerpo a través de escenarios físicos e imaginarios. Un trabajo dedicado a la exploración en cada uno de sus temas.
Por: Lore Luna, editora
1. Kim Gordon – “The Collective”
A mi gusto personal Kim Gordon es el mejor proyecto solista después de la separación de Sonic Youth, impresionante, sombrío y con una vibra totalmente diferente a la banda que pertenecía, en esta ocasión, no solo nos presenta su nuevo material, si no también un nuevo sonido que va a algo más allá que el noise rock, nos encontramos con glitches, sonidos electrónicos, tintes inclinados totalmente al trap y una Kim Gordon acercándose al hip-hop en una forma más de spoken word. Un acercamiento mas Avant-garde al género y que resulta en un ejercicio sumamente descolocante, vale mucho la pena.
2. Squarepusher – “Dostrotime”
No soy un fan a morir del trabajo que saco Squarepusher durante los 2010’s, por eso entre un poco escéptico a este nuevo acercamiento y definitivamente en una mejora tremenda a todo aquello que no me ha gustado los últimos años. Realmente es un material complejo que se desenvuelve de manera interesante con su ya tan característico drill and bass. Probablemente su mejor disco desde “Ultravisitor” y un gran acierto para el productor, ojalá pronto se nos haga ver un set de él en tierras mexicanas.
3. Four Tet – “Three”
El último álbum del inglés es una experiencia inmersiva completamente en el downtempo que logra convertise en una experiencia hipnotizante que tambien fusiona esos clásicos elementos de microhouse y folktronica que hacen que todo se vuelva una experiencia calidad, muy disfrutable y den ganas de escucharlo de principio a fin. Recuerda un poco a sus primeros trabajos, pero se nota que la dirección de su música ya está en otro norte.
4. samlrc – “A Lonely Sinner”
Samantha Rodriguez da Cruz o mejor conocida como samlrc lanzo este año un disco que sale de las peculiaridades de sus trabajos anteriores, donde cambia la electronica o el glitch pop por el post-rock, quizá se pensaría que un cambio de esas magnitudes no tendría sentido, pero es todo lo contrario a eso, ha sido una experiencia que me volo la cabeza. La atmósfera que logra crear, las melodías que progresan con lentitud y calma y la forma en la que se parece tratarse todo de un sueño, me ha atrapado desde los primeros segundos, es una experiencia fenomenal de parte de la brasileña quien a su corta edad de 20 años, demuestra aquí, que es uno de los trabajos que se deben seguir en los años que vienen.
Por: Robert Trejo, fotógrafo
1. Mannequin Pussy – I Got Heaven
El cuarto álbum de la agrupación originaria de Filadelfia es un gran paso adelante no solo artísticamente sino comercialmente, después de varios años en el underground norteamericano y ahora formando parte del legendario sello, Epitaph, con su disco pasado Patience (2019) llamaron la atención de propios y extraños, ahora con este nuevo disco combinan de gran forma la melodía y el ruido, el pop y el punk, las letras rabiosas y la dulzura melancólica, se alejan de Hole y se acercan más a Liz Phair, la voz de Marisa Dabice ha evolucionado y se nota el trabajo, las dinámicas de guitarras tienes capas más finas de efectos y melodías muy agradables, el bajo y batería siguen inalterables, fuertes, precisas y contundentes, sin duda alguna este álbum los va a llevar a nuevas audiencias, de inicio a fin jamás se pierde la vibra grunge/power pop y más allá de retomar un sonido sumamente familiar, tratan de crear su propia voz y eso se agradece en la actualidad. Un gran disco.
2. Gouge Away – Deep Sage
La contraparte de Mannequin Pussy, es Gouge Away, agrupación originaria de Florida y que también forman parte de otro gran sello, Deathwish, su vocación Hardcore y Post Hardcore se mantienen intactas pero le han metido un poco de la dinámica Fugazi o Pixies, es decir ruido y melodía, pero con una voz mucho más rauda y afilada, guitarras y bajos mucho más cargados y noisy que por momentos recuerdan más a Husker Dü o Dinosaur Jr, además de una batería sencilla pero sumamente potente, Christina Michelle sabe aprovechar los vaivenes emocionales de la música para poder cantar suave , a veces solo hablar y muchas otras veces más gritar a todo pulmón, otra banda que también parece que toma la moda noventas, pero que por fortuna está creando su propia voz y estilo, ojalá más bandas hicieran eso, denle una oportunidad y no se arrepentirán. Otro gran disco.
3. Adrianne Lenker – Bright Future
Con una portada que recuerda más a la cada vez creciente moda Country en Estados Unidos y Canadá, Adrianne entrega su sexto disco y donde muestra que es una de las mejores cantautoras de la actualidad, un disco redondo donde explota la visceralidad pero también la intimidad que no puede (o no quiere) sacar en Big Thief, su voz tan fina y dulce es la guía de un disco que se siente no solo como una agradable extensión de toda su discografía previa sino que líricamente ahonda en el amor, desamor, las dudas existenciales y los sueños perdidos, un álbum contemplativo pero no por ello, aburrido, al contrario, musicalmente es muy inteligente la forma de mezclar folk, country, pop y psicodelia, magistralmente Bright Future se siente auténtico y sobre todo fresco, dentro de un género tan manoseado como lo es el Folk, este sin duda será uno de los mejores discos del año.
4. Tyla – TYLA
Tyla Laura Seethal, mejor conocida como Tyla, es la nueva exponente de esta tendencia a voltear a ver a los artistas emergentes del afrobeat y r&b, de origen sudafricano, la joven cantante no solo entrega un álbum debut donde rompe el dancefloor, como todos los buenos discos de afrobeat, sino que combina cosas muy agradables como el house, el dancehall, el pop, el neo soul y el r&b, cosa que le da frescura a su propuesta altamente bailable, de inicio a fin el disco invita a bailar pero también a añorar al ser amado, el trabajo vocal es impecable y la producción es muy fina y acertada, si duda alguna esta chica tiene un gran futuro y en Europa cada vez ha ido generando más ruido y conquistando a la muy pretenciosa prensa británica, ahora lo que le falta (y que tiene el potencial lograrlo), es conquistar Estados Unidos, muy buen disco y que vale la pena escucharlo.
Por: Ian Pavel, colaborador
1. Julia Holter – Something in the Room She Moves
Después del excelente Aviary de 2018, era difícil imaginar cuál sería el siguiente paso para Holter. En esta ocasión nos trae un álbum inspirado tanto en el nacimiento de su hija y el convertirse en madre como en la perdida de algunos familiares.
El resultado es un disco a momentos solemne pero juguetón en otros, con sonidos sacados del ambient y el art rock a los que ya nos tiene acostumbrados. Brillante.
2. Pissed Jeans – Half Divorced
Tuvieron que pasar 7 años para tener un nuevo LP de esta banda de Maryland. Y si bien, no es un disco que se aleje mucho de ese noise rock noventero que representa buena parte de su discografía, esta vez se acercan más a los terrenos del hardcore punk de una forma más directa. Un disco intenso y contundente con algunos de los mejores tracks de su carrera.
3. Waxahatchee – Tigers Blood
Con cada uno de sus lanzamientos, el proyecto de Katie Crutchfield se siente más refinado y maduro pero Tigers Blood se siente como un paso gigante en su obra.
Un disco con un trabajo lírico excepcional pero que, al mismo tiempo, se siente como un trabajo hecho por una banda hecha y derecha, gracias a las contribuciones de Spencer Tweedy, Brad Cook y Phil Cook, entre otros. Fino en sus detalles pero directo en su ejecución, ese bien podría ser el mejor álbum de Waxahatchee y es de lo mejor del año
Por: Jan Servín, colaborador
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